Acceso al inconsciente

Acceso al inconsciente.
Los siguientes investigadores buscaron las formas que se mencionan a continuación para acceder a los contenidos inconscientes :
Signund Freud señalaba que a través de la asociación libre se podía llegar a los contenidos reprimidos o traumáticos que conforman el inconsciente.

Carl Gustav Jung, quien fue mencionado en el punto anterior realizo investigaciones relacionadas a la interpretación y el análisis de los sueños, también realizó con una prima materna, Helene Preiswerk, experimentos sobre espiritismo y posteriormente investigo el significado del comportamiento y del lenguaje psicótico.

Dr. Stanislav Grof, Es uno de los creadores de la Psicología Transpersonal, y un pionero del trabajo con los estados no ordinarios de conciencia. Es el teórico más importante en la investigación del campo de la conciencia humana e inicio un enfoque experimental utilizando LSD para provocar estados no comunes de conciencia y acceder a los contenidos del inconsciente y subconsciente.

Actualmente este acceso se realiza mediante un método llamado de respiración holotrópica, que desarrollo junto a su esposa Cristhine durante los últimos 18 años. Este proceso, aparentemente simple, combina métodos de respiración, música evocativa, trabajo corporal y expresión artística y posee un extraordinario potencial para abrir el camino y explorar todo el espectro del mundo interior.

Las investigaciones del Dr. Stanislav Grof describieron una nueva cartografía de la psiquis humana, que le permitió distinguir tres niveles básicos a los que se puede acceder, estos son:

El biográfico tradicional
El perinatal
El transpersonal
El nivel biográfico es al que se accede con la mayoría de las terapias tradicionales, los otros dos van más allá de las técnicas verbales.

Según Groff todos los seres humanos poseemos, la capacidad de revivir las emociones y las sensaciones físicas que experimentamos durante nuestro pasaje por el conducto vaginal cuando nacemos, y también podemos reexperimentar episodios que tuvieron lugar cuando éramos fetos en el seno materno. Pero también podemos retroceder en el tiempo y ser testigos de secuencias de la vida de nuestros ancestros humanos y animales, de acontecimientos que involucran a personas de otras épocas históricas o pertenecientes a culturas con las que no tenemos ninguna vinculación genética. Podemos incluso explorar realidades mitológicas, u otras cuya existencia ignorábamos hasta ese momento, dando a entender que en lo inconsciente se accede a un campo o espectro de contenidos psíquicos que trascienden nuestros contenidos personales y que constituyen los contenidos psíquicos colectivos o compartidos por todos los seres humanos mencionados por Jung.

En base a estos mecanismos es posible reelaborar toda emoción que haya quedado bloqueada en el recuerdo de eventos difíciles de la vida o incluso perteneciente a los ámbitos transpersonales a los que puede accederse en este tipo de trabajo terapéutico.
Todo el contenido relacionado a traumas experimentados y que yacen en la raíz de nuestros temores e inseguridades, síntomas o cualquier expresión de un conflicto psíquico se hunden en lo más profundo de nuestra personalidad, en lo que se ha dado en llamar el inconsciente individual, y se ocultan por medio del proceso que Freud llamó represión.

Mediante este tipo de trabajo terapéutico se accede a contenidos claves y significativos de nuestro pasado y se hacen accesibles a la conciencia para que, mediante el entendimiento consciente, encontrar una explicación y mediante esa toma de contacto con la raíz del conflicto se produzca la mejora y la eliminación de los síntomas, dado lo evidenciado en la práctica psicoterapéutica.
Ahora cuando se ingresa mas halla de los acontecimientos biográficos de la primera infancia, se entra en el terreno de las experiencias asociadas al trauma del nacimiento, en que paradójicamente, las emociones y sensaciones físicas son de gran intensidad e incluso sobrepasan todo lo que podemos considerar humanamente posible. Entendiéndose que el nacimiento en si mismo, es un trauma que deja su huella en el inconsciente o podría conformar un estado de desarraigo traumático al respecto de la protección del vientre materno, en contraste con el ingreso al mundo físico, que se torna inicialmente agresivo para el bebe recién nacido.

En el nivel transpersonal se identifica una apertura psíquica inconmensurable y se rompen las barreras de lo concreto y la lógica propia del estado consciente al cual estamos acostumbrados a experimentar y se puede acceder a contenidos que podrían estar relacionados incluso a lo futuro, a la dinámica de la naturaleza y la interrelación humana, o sea a las raíces de la dinámica de la vida y actividad psíquica consciente individual y colectiva, ya que se evidencia la existencia de campos o espectros de conciencia, en donde se trasciende lo meramente individual, aun sin que exista un abandono de la individualidad.